¡Esto es la guerra! 50 películas esenciales del cine bélico

La violencia, ese instinto animal arraigado en el hombre desde tiempos remotos, se institucionaliza a través del Estado, poseedor de su monopolio bajo el amparo de la ley, para impartirse desde motivaciones supuestamente legítimas; entre otras, la de salvaguardar la paz social mediante esa represión que trata de mantenernos alejados de la barbarie. Intrínseca a esa prerrogativa del Estado está la facultad de obligar a sus ciudadanos a secundar esa violencia, aportando su sufrimiento e incluso su propia vida y la de sus seres queridos. El cine, reflejo de todas las facetas que engloba la...