Prométeme que serás silencio
Nada encontrarás en estos versos, sino el reflejo de tu propio corazón, meditaciones tempranas que hicieron sangrar y dieron vida al poema, alguna que otra ilusión vana de Ser. El amor redime, cicatriza y abre cárceles. Vuelvo a ti, desnudo de mí mismo, para que sepas que Dios, la vida y la muerte caben en un sentimiento. Por lo demás, ella alumbra la senda que aún me queda por recorrer.