Biblioteca Libros

Biblioteca de descarga de ebooks en formatos PDF, EPUB y MOBI

SÓLO INSTANTES

Sinopsis del Libro

Libro SÓLO INSTANTES

Gabriel Rojo Vences, nace en los albores del año 62, en lo alto de las montañas del sur del Estado de México, de la hermosa República Mexicana, descendiente de campesinos que por lo numeroso de su familia fue marcado por las caricias del abandono. Aprendió a luchar por la vida en el bosque y la llanura, entre ríos y peñascos, entre sueños e imaginarios; su refugio, la escuela, ahí sin estar acompañado no se encontraba tan solo. A sus ocho años de edad, entra en vínculo con su guitarra, con quien a partir de entonces habría de transitar las distintas lunas y soles que han confi gurado su devenir, compañera inseparable con quien ha hecho del silencio y la soledad su refugio. A principio de los años ochenta concluye sus estudios de Prof. de Educación Primaria; durante su andar por los senderos de la formación, realiza estudios de Licenciatura en Educación Básica en la Universidad Pedagógica Nacional y la Maestría en Educación Superior, en la Escuela Normal Superior del Estado de México; concluyendo recientemente estudios Doctorales en Didáctica y Conciencia Histórica, en el Instituto de Pensamiento y Cultura en América Latina, acompañado por grandes humanistas y pensadores latinoamericanos como el Dr. Hugo Zemelman, Estela Quintar y Patricia Paredes entre Otros, quienes le han dejado profunda huella en la lucha por el rescate del ser humano y que ahora nos comparte con palabras teñidas de metáfora, fragmentos de su sentir desde lo real y lo imaginario, desde su apreciación de mundo, hasta su caminar por él.

Ficha del Libro

Total de páginas 48

Autor:

  • Gabriel Rojo Vences

Categoría:

Formatos Disponibles:

MOBI, PDF, EPUB, AZW

Descargar Libro

Valoración

Popular

4.8

45 Valoraciones Totales


Otros libros de la categoría Poesía

El Oceano de Aidualc

Libro El Oceano de Aidualc

Transcurran los dias de mi adolescencia Cuando empecé a sentir extraños sentimientos de angustia y de dolor Inespicablemente no había nada externo que lo ocasionara y cada vez era peor Sentía ganas de volar de escaparme entre verdades y mentiras solo para justificar mis emociones que en ocasiones también ahuyentaban asta mis peores temores Y no fue hasta que la muerte toco a nuestra puerta llevandoce lo mas valioso a mi adorada mamá luz Sufri como nunca y aunque han pasado 26 años aún me hace falta Ahí en ese momento todo se agrabo la verdadera soledad se sentía por doquier...

Un Paisaje

Libro Un Paisaje

La luz se apaga, la conciencia permanece alerta y quien vaga a través del espacio lo hace también a través del tiempo: el aire está saturado de pasado, hay una triste densidad espectral. Las manos que tantean en la oscuridad giran en el aire como las agujas de un reloj. Pero, en virtud de un terror onírico muy propio de los poemas de José Carlos Rosales (Granada, 1952), esas manos no logran toparse con nada. Las cosas se acurrucan, evitan el contacto. La habitación no solo está a oscuras: está vacía. Como en ella, las palabras cruzan el resto de estos poemas donde el espacio ha...

Azul ultramar

Libro Azul ultramar

A un artista francés llamado Yves Klein, posiblemente daltónico, le dio por pintar los árboles de azul. De un azul eléctrico, intenso y monocromo, pero con matices y que hipnotiza a quien lo contempla. Un color que lo mismo irradia luz como proyecta sombra, evoca una pasión o encoge el alma. El sugerente potencial del azul ultramar está de moda. En su día, le dediqué una entrada en mi blog «El bazar de la Retórica» que ilustré con la escultura de Klein L’Arbre, grande éponge bleue, expuesta permanentemente en el Centro Pompidou de París. Este árbol se grabó tanto en mi...

La geografía de tu nombre

Libro La geografía de tu nombre

«Palpita en el fondo de estos poemas un trasunto biográfico, una dimensión confesional, pero todo queda trascendido mediante imágenes que intensifican el vitalismo y la pasión. Somos amores que se fueron y a los que todavía esperamos [...] Está también la historia presente y la sociedad de nuestro tiempo, pero está sobre todo ese pulso herido que va al encuentro de aquello que fue». Diego Doncel, prólogo. «Escribes poesía porque lees poesía. Podría decir que escribo poesía porque leí unos versos que me dejaron, gran desatino, sin palabras. Por la vía negativa, dirían los...

Ultimas Novedades Blibliográficas



Últimas Búsquedas


Categorías Destacadas