El circo de la noche

Mi nombre es Julián Romero de Ibarrola y soy maestre de campo de los tercios del rey nuestro señor. Sirvo hoy con don Felipe II como ayer serví con su augusto padre, el césar Carlos. Queréis que os cuente mi historia y yo os diré que mi único mérito es haber salvado la piel donde otros dieron la vida. Constato en vuestras miradas que no sabéis lo que pasó en San Quintín. Avergonzaos, ganapanes, porque pocas páginas han escrito nuestras armas más gloriosas que aquella victoria, en la que este vuestro servidor cayó herido cuando una bala de mosquete me perforó una pierna y desde...

Tras las paredes de un elegante rascacielos de cuarenta pisos a las afueras de Londres (el primero habitado de cinco edificios iguales) sus dos mil inquilinos se entregan a una orgía de destrucción. Las fiestas degeneran en ataques a los pisos "enemigos" y la tecnología va dejando de funcionar hasta que en todas partes impera la ley de la selva. Ballard muestra en esta distopía radical el descenso a la barbarie de una comunidad cerrada de profesionales acomodados.

Al capitán Lewis Brabant no le hacía ninguna gracia abandonar la vida en el mar para volver a Hewly Manor, junto a Steepwood, en busca de una novia, pero sus amigos le habían sugerido que tal vez encontrara la solución a sus toscos modales si se casaba.En Hewly vivía una prima que también quería ver casado a Lewis... con ella. Pero no era por su hermosa y astuta prima por quien Lewis sentía una atracción irresistible, sino por su amiga, la enigmática Caroline Whiston.

Se producen una serie de asesinatos justo cuando el filósofo Pitagoras debe elegir su sucesor. La enigmatica Ariadna, el investigador egipcio Akenon, el propio Pitagoras y el asesino, entablaran una carrera por dar con el asesino y, a su vez, ahuyentar sus propios miedos