Abracabú-abracabicho: A comer se ha dicho!
Lograr que los niños se aficionen a analizar su entorno con un poquito de picardía, con un poquito de guasa respetuosa y hasta con un poquito de malicia constructiva continúa siendo una de las prioridades que, como escritor, asume Masuriel. Y vuelve a presentar otro Librito dedicado a ellos alentado por los ¡tantos! que a él se han dirigido pidiéndole que les escribiera una segunda parte del que fuera el primero, aquél que él llenó de tonterías divertidas y de situaciones estrambóticas y de imaginaciones esperpénticas, y que tanto les gustó a los que lo leyeron. Y como él no...