Sobre la muerte de los perseguidores

Lactancio abandona aquí el tono comedido y argumentativo de las Instituciones divinas para adoptar una actitud vehemente en el relato del castigo divino a los emperadores que se ensañaron con los cristianos. Si Lactancio (245-325 d.C.) justifica en su obra principal, Instituciones divinas, el apelativo de "Cicerón cristiano" y se rige por principios racionales para argumentar con serenidad y transmitir el mensaje cristiano a la razón del lector con un tono más persuasivo que polémico, en Sobre la muerte de los perseguidores adopta una actitud beligerante, de ataque y asedio contra los...